Škoda ha demostrado que puede fabricar coches con un precio atractivo, repletos de tecnología al mismo tiempo y que apenas pierden valor. Los checos tienen otra baza a su favor: fabricar concept cars que impresionan y plantean la pregunta de por qué se quedan sólo en un concepto sin posibilidad de producción en serie. ¿Estás buscando y no sabes dónde vender tu coche? En el concesionario Crestanevada compramos tu coche con la mejor tasación online.
Nadie esperaba realmente el Škoda RS 2000 en Wörthersee en 2011, un Fabia con el techo completamente eliminado, pasos de rueda más anchos y algunos otros cambios estéticos. El siguiente martillo pilón fue el Škoda Citigo en versión de rally. Cada vez que paso por delante de él, siempre me pregunto cuándo Skoda lo meterá por fin en la Super 1600 y lo hará limpiar.
Dos años después, el Škoda Rapid Sport Concept se presentó en Wörthersee 2013. Un coche que sugiere la idea de un Rapid RS, pero que se descartó justo al inicio de la producción de la pequeña berlina. El panorama pide a gritos un RS que cierre la brecha entre el Fabia y el Octavia. Ya hay muchas delicias visuales, pero al fabricante le falta apoyo para estar preparado para meter el «viejo» 2.0 TSI bajo el capó.
El Rapid Sport Concept encarna todo lo que la dirección no quiere admitir. El mercado está ahí, el interés es enorme y los compradores están preparados. En mi opinión, el esquema de pintura bicolor en particular merece una oportunidad para sacudir las carreteras (alemanas). Basta ya de plata y negro, el Concept podría recuperar algo de colorido. Las llantas de 18 pulgadas, pintadas de forma diferente a izquierda y derecha, van a juego. Puede que las salidas de aire del capó sean un poco exageradas, pero aun así se integran de forma excelente en el diseño general. Los pasos de rueda más anchos, los faros traseros LED oscurecidos, el borde rasgado de la tapa del maletero y el poderoso difusor de carbono probablemente crean más carga aerodinámica de la que el Rapid podría necesitar.
En conjunto, fue un concepto que impresionó a los fans de VW in situ, así como en los reportajes de las revistas (online). Entonces, ¿por qué no construirlo? El difusor no tiene que ser necesariamente de carbono, aunque sólo sea por razones de coste, pero el resto, ¡eso sí! El Škoda Rapid Sport Concept es algo más que el sueño de un diseñador hecho realidad; muestra lo que la marca puede hacer, o podría hacer, si se le deja a su aire. A la junta directiva de VW: ¡dale a Škoda un poco más de correa!