No, una prueba comparativa ordinaria -especialmente en circuito- tiene otro aspecto. Pero si quieres entender de lo que son capaces los SUV actuales en términos de prestaciones, la comparación del BMW X7 M50i y dos deportivos japoneses tiene mucho sentido. Principalmente, estamos hablando del nuevo Toyota Supra, que, como sabemos, es un pariente cercano del BMW Z4 M40i y cuyos tiempos por vuelta no pueden esconderse de ningún deportivo del mismo rango de precios. ¿Furgonetas en Toledo? Encuentra aquí las mejores furgonetas de segunda mano en Toledo.
Pero a efectos comparativos, The Fast Lane Car también envió a la pista al Toyota GT86, predecesor no oficial del Supra. Aunque el coupé deportivo compacto con su motor bóxer de 200 CV es unos años mayor y también juega en una liga diferente en términos de rendimiento, también es con diferencia el candidato más ligero del inusual trío.
El BMW X7 M50i es completamente diferente de los dos coupés. El SUV de lujo no pertenece a los circuitos de carreras, aunque la variante M Performance con su V8 biturbo de 530 CV es cualquier cosa menos lenta. Sin embargo, queda claro desde el principio que el enorme y noble todoterreno, con su peso en orden de marcha de más de 2,3 toneladas, tiene unos puntos fuertes muy diferentes a los de perseguir tiempos de vuelta.
Lo que ocurre cuando se hace de cualquier manera y se envía al BMW X7 M50i a la pista de carreras bien podría deparar algunas sorpresas. Porque cualquiera que piense que el gigante de Spartanburg no tiene ninguna posibilidad contra el pequeño japonés se equivoca en el vídeo: